Un post más... un nombre más... un amigo más
Tengo un par de semanas queriendo inventar algo para reunir a la promoción 95 del externado... tengo un par de meses teniendo miedo de la nostalgia de este mes... Julio es, para mí, símbolo de nacimientos y muertes, como todos los meses. Más nacimientos que superan las muertes o más muertes que superan los nacimientos... yo creo que más muertes que no superamos quienes vivimos. Nos superan los índices, los números, las muertes violentas por día. Nuestros muertos y muertas...
El desahogo es el único recurso con el que contamos en estos momentos... escribí tanto para la muerte de mi hermana, hemos escrito tanto para la muerte de nuestro amigo Lino... una muerte más, pero no uno cualquiera. El nuestro, nuestro compañero y amigo, el ex perico, profesor, jugador, dentista, padre, hijo, esposo... el ser humano único. Es necesario seguir escribiendo, visibilizar que no es una muerte más, que es la cifra que se nos vuelve al rostro y nos golpea. Y allí es donde surge la necesidad de que no quede en esa cifra. Que su muerte no sea en vano.
Nada puede devolvernos a quien perdimos, nada puede llenar ese vacío nunca, nadie ni nada va a lograr que esto nos pase, les pase o se le olvide a su familia... esto es algo que nunca más se va a olvidar, lo importante es que además del dolor, nos traiga algo, nos deje algo, nos regale una oportunidad de hacerla menos invisible y que la impotencia se transforme.
Todos los días el hijo, la esposa, el hermano, la amiga, el sobrino, la tía de alguien está muriendo en situaciones violentas a causa nuestra...nuestra porque cada uno/a es responsable de lo que decide hacer o no frente a los problemas. Nuestra causa porque seguimos inmersos en nuestras casas, protegiéndonos, protegiendo a los nuestros, encerrándonos más y ahora la inseguridad y la violencia nos toca la puerta y nos cuenta la historia en nuestros propios términos, arrebatándonos a un compañero y amigo... alguien a quien no necesitamos inventarle un rostro, lo conocemos de desvelos, recreos, mesitas, tienda, biblioteca, partidos, misa, intramuros, día de cabezones... no tenemos que imaginarnos a su familia, no tenemos que rezar porque no le pase a alguien cercano, es alguien cercano a todo.
Nuestro miedo se ha hecho presente y yo no puedo evitar darle a mi cabeza la oportunidad de salvarse de este pesar que tiene, no puedo pensar que será una muerte más, no puede ser. Por eso creo que sus vidas deben seguir dejándonos luchas en el camino, a sus muertes sin sentido, debemos darle un sentido: debemos generar cambios, EXIGIR CAMBIOS.
El día de la misa en la UCA para despedir a Nathalie hace casi 4 años, me dolió estar tan enojada, enojada porque una joven de 22 años se había ido por negligencia de otros; me dolió sentir tranquilidad, porque tantas veces la habían asaltado, manoseado, estuvo expuesta a tantas cosas, las cosas a las que todos/as estamos expuestos/as al vivir en este país. Me pareció triste y preocupante sentirme enojada; pero en el fondo, estaba más tranquila porque yo ya no iba a estar preocupada por cada vez que me enteraba que salía de noche o andaba estudiando o andaba manejando sola, que ya ella de verdad, descansaba en paz y yo también... Esto no es normal, ese no es un sentimiento normal, la inseguridad no es justa, vivir con miedo no es normal... desear que tus seres queridos vuelvan a casa completos y bien de cualquier lugar al que vayan, a cualquier hora, no es normal; no desear hijos/as para no exponerlos a esta vida, no es normal; agradecer porque no te pasó algo peor, no es normal...
Por eso, por Lino, por la vida, hagamos y exijamos que la vida, en lugar de la muerte, sea normal.
Más escritos y reflexiones de compañeros/as sobre este nombre, este amigo, sobre Lino:
http://foxilmente.blogspot.com/2009/07/de-brazos-abiertos.html (Luis Avilés)
http://siguientepagina.blogspot.com/2009/07/solo-en-la-muerte-recuperamos-nuestro.html (Rodrigo Samayoa)
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Rodrigo -